Practicar el desarrollo dirigido por la comunidad

Practicar el desarrollo dirigido por la comunidad

Practicar el desarrollo dirigido por la comunidad

Steve Fisher

A primera vista, el desarrollo dirigido por la comunidad debería ser sencillo. Un grupo de personas con intereses comunes decide un objetivo que quiere alcanzar o un problema que quiere abordar. Consiguen apoyo externo, es decir, conocimientos técnicos, materiales y fondos. Entonces desarrollan un plan para algo que probablemente se llame proyecto. Se ponen en marcha y lo ejecutan.

En el proceso de elaboración de un nuevo curso sobre la práctica del desarrollo dirigido por la comunidad, he estado pensando en lo que hace que el tema sea más complicado en la práctica de lo que podría parecer desde fuera. Un punto de partida es establecer los parámetros. Los ejemplos de proyectos dirigidos por la comunidad se dividen en cuatro categorías:

  1. Mejoras en las infraestructuras locales, como carreteras, suministro de agua o mejores viviendas

  2. Empresas o servicios nuevos o mejorados para subsanar las carencias, por ejemplo, en materia de atención infantil o educación

  3. Iniciativas diseñadas para hacer frente a los problemas que pueda tener la comunidad, como los conflictos o la falta de vivienda

  4. Proyectos para desarrollar habilidades y capacidades locales con fines específicos, como el liderazgo de los jóvenes o la gobernanza de la comunidad.

La base del éxito de los proyectos son los métodos y técnicas, habilidades y aptitudes que definen la práctica del desarrollo dirigido por la comunidad. Aplicados con habilidad y cuidado, permiten alcanzar los objetivos de un proyecto. Pero las comunidades son complejas, por lo que nada es fácil.

En el centro de la mayoría de los proyectos hay un conjunto de relaciones entre la comunidad, una organización ejecutora, algunos contratistas especializados y una agencia gubernamental o un financiador privado (o ambos). Los procesos de toma de decisiones, el poder y la autoridad que se ejercen a través de esas relaciones tienen una profunda influencia en los resultados finales. Esto significa que los acuerdos entre las partes y la forma en que se aplican son fundamentales.

La cuestión de qué personas de la comunidad participan en el proyecto y cómo lo hacen lleva mucho tiempo preocupando a cualquiera que haya trabajado en este campo. Las estrategias que tienen en cuenta las prioridades de los distintos grupos de población dentro de la comunidad, así como las de aquellos ajenos al proyecto que puedan verse afectados por él, son fundamentales para una práctica eficaz. Hay que definir el papel de las mujeres, los hombres, los jóvenes, las personas con discapacidad y los grupos minoritarios dentro de la comunidad, sobre todo cuando se toman decisiones clave.

Todos los proyectos deben ser diseñados. Es decir, requieren que se reúnan las partes de manera que puedan llevarse a cabo. Estos componentes incluyen objetivos claros, un equipo, recursos y conocimientos y un conjunto de actividades definidas y programadas (el trabajo real que se va a realizar).

Del mismo modo, todos los proyectos deben ser gestionados de forma responsable para permitir que el diseño se lleve a cabo. El papel de los datos es fundamental para una gestión eficaz de los proyectos, ya sea para calibrar los avances, para obtener la medida correcta de las necesidades y prioridades de la comunidad o en el seguimiento y evaluación del trabajo. Los procesos de aprendizaje y mejora a través de los datos recogidos también forman parte del panorama general.

Dado que los proyectos dirigidos por la comunidad se ocupan de mejorar la salud, el bienestar, la seguridad, la prosperidad y la felicidad de las personas, las consideraciones de ética y equidad son fundamentales para la práctica del desarrollo dirigido por la comunidad.

A medida que vayamos desarrollando el curso, ofreceré más actualizaciones a través del blog de Community Works.

Las realidades prácticas del fortalecimiento de las organizaciones comunitarias

Las realidades prácticas del fortalecimiento de las organizaciones comunitarias

Las realidades prácticas

del fortalecimiento de las organizaciones comunitarias

Steve Fisher

Hace muchos años tuve la oportunidad de trabajar con comunidades de habla Quechua en los altos Andes del norte de Perú. En una ocasión formé parte de un equipo que realizaba una evaluación de necesidades para determinar qué programas o servicios podría ofrecer una ONG local.

En una de las primeras comunidades que visitamos, paramos en la calle para hablar con uno de los hombres mayores. Hacía frío y había niebla. Él llevaba un gran sombrero y un poncho grueso. Parecía curtido por el clima. Le preguntamos qué programas existían ya en la comunidad, especialmente apoyados o gestionados por organismos gubernamentales. Su respuesta fue «el estado no llega aquí». Parecía sorprendido de que no lo supiéramos.

Esta experiencia, y muchas otras desde entonces, me han llevado a pensar a menudo en las formas en que se puedan satisfacer mejor las necesidades de desarrollo social si no llega el gobierno, que es la situación para la mayoría de las comunidades de muchos países. Las otras opciones son el sector privado, las organizaciones no gubernamentales o de la sociedad civil o la propia comunidad.

Por supuesto, el Estado podría no ser la mejor opción de todos modos. Durante un proyecto reciente, me enteré de que un solo departamento del Gobierno de Victoria (un estado de Australia) tiene contratos con más de mil ONG, a las que financia para que puedan ofrecer acceso a servicios sociales. Por supuesto, este acuerdo depende de que el gobierno tenga los recursos, el mandato y la responsabilidad de apoyar los servicios de esta manera. Sin presupuestos, las ONG no están en condiciones de mantener los servicios. Y si los usuarios de los servicios no pueden pagar el costo total, el sector privado tampoco puede mantener un servicio viable.

Y así llegamos a las organizaciones locales o comunitarias. Hay muchos ejemplos muy eficaces que son desconocidos más allá de su propia ubicación. Hace dos años, en una zona rural de Colombia, mi colega Carolina y yo visitamos una organización que ofrece servicios de educación y apoyo a niños con discapacidad. Su trabajo se sostiene en gran medida gracias a los voluntarios y a las contribuciones de la población y los negocios locales. Mientras trabajábamos allí, el dueño de una tienda entregó una donación de alimentos y un hotel cercano nos proporcionó alojamiento gratuito.

El equipo de Community Works discute a menudo con las organizaciones comunitarias cómo pueden reforzar su trabajo. Nosotros mismos hemos sido voluntarios, por lo que también tenemos ideas. Enfrentadas a los retos diarios de apoyar a sus participantes, pocas organizaciones tienen tiempo para reflexionar. A veces no saben lo que no saben. Pero si se les da un espacio para pensar en las formas de fortalecer su trabajo, solemos escuchar las mismas preguntas, que comparto a continuación con comentarios sobre los enfoques que han sido eficaces en mi experiencia.

¿Cómo podemos desarrollar nuestra capacidad técnica?

Si tomamos el ejemplo de la salud mental comunitaria y sus innumerables subdivisiones, como la prevención del suicidio y el apoyo a las personas que se sienten solas y aisladas, las organizaciones pueden sentirse a menudo faltas de conocimientos clínicos si no hay un especialista en salud mental formado en el equipo de trabajo. Lo mismo ocurre con una serie de campos que se benefician o requieren conocimientos técnicos especializados, que en el sector social incluyen la atención a las personas mayores, los servicios para discapacitados, el desarrollo de la primera infancia y muchos otros.

Sin sugerir que haya respuestas fáciles a ninguno de estos retos, en una situación en la que se carece de capacidad técnica, una estrategia de desarrollo del sector puede ser una opción que merece la pena. Esto significa que las organizaciones trabajan juntas como grupo y buscan asesores externos para apoyar al sector en su conjunto. Las economías de escala pueden hacer que el apoyo técnico especializado sea más asequible y la perspectiva es más atractiva para los especialistas porque tienen la oportunidad de apoyar una gama más amplia de situaciones. He visto versiones de este enfoque que funcionan bien en la India y Sri Lanka, por ejemplo.

 
¿Cómo podemos innovar?

Las organizaciones suelen tener muchas ideas, pero pocas herramientas para convertir lo que les ha inspirado en un proyecto con objetivos, un plan, hitos, recursos y medios para mantenerse. La introducción de métodos como la teoría del cambio, los modelos lógicos, los marcos conceptuales y una forma estructurada de preparar un documento de diseño puede ser una experiencia que empodera, incluso liberadora, porque ayuda a las organizaciones a cristalizar lo que pueden haber estado hablando durante mucho tiempo.  

Un taller facilitado puede ser una forma muy eficaz de apoyar el proceso de convertir una idea en un proyecto, como he visto en múltiples ocasiones. Nuestra publicación El mosaico de la facilitación, disponible en el sitio web de Community Works, ofrece orientación para que los talleres funcionen.

 
¿Cómo podemos reforzar nuestros procesos de gestión y gobernanza?

La forma en que se toman las decisiones al igual que la forma en que funciona el liderazgo y la gestión, suele estar muy influenciada por las aptitudes de personas con antecedentes o bagajes a menudo diversos. Muchas personas de la localidad que se ofrecen como voluntarios para las organizaciones o son miembros de su junta directiva suelen tener aptitudes sólidas y experiencia, pero de sectores no relacionados con el de la organización a la que prestan apoyo. Una organización de acogida o un hogar de paso pueden tener como miembros de la junta a un agente inmobiliario local y a un abogado, por ejemplo. Esto es útil, pero pueden carecer de conocimientos en el sector social o de desarrollo y no necesariamente sabrán lo que es una buena práctica, fuera de las disciplinas profesionales de las que proceden. Por este motivo, las organizaciones se preocupan a veces por saber si gobiernan y gestionan de acuerdo con lo que podría llamarse una buena práctica del sector social o del desarrollo.

De nuevo, existen herramientas, métodos y principios de buenas prácticas que pueden ayudar. Por ejemplo, recopilar datos sobre la participación y el impacto del trabajo de la organización es esencial en cualquier esfuerzo por conseguir apoyo y financiación. Garantizar la existencia de estrategias para la participación de la comunidad y protocolos para la seguridad cultural son otros pasos importantes. Es esencial basar el trabajo de la organización en investigaciones publicadas y en el conocimiento de un campo de trabajo. Todos estos elementos de refuerzo de la gestión y la gobernanza pueden lograrse buscando apoyo externo o estableciendo redes con otras personas que trabajan en este campo. Un buen ejemplo en Australia es el SNAICC, el Secretariado Nacional de Atención a la Infancia Aborigen e Isleña, y la Alianza Nacional de Salud Rural, que organizan conferencias nacionales que son un hito para muchas organizaciones y su personal.

¿Cómo podemos atraer financiación?

Muchas organizaciones comunitarias no cumplen las condiciones necesarias para la financiación filantrópica. Pueden carecer de una junta directiva, una estrategia, un registro adecuado o una constitución. E incluso si las cumplen, es posible que no dispongan de los conocimientos necesarios para preparar una solicitud de financiación convincente. También hemos visto situaciones en las que las organizaciones tienen dificultades para encontrar tiempo para responder a las consultas y requerimientos de los financiadores interesados, siendo esta una de las limitaciones de su capacidad de gestión.

Es demasiado fácil sugerir aquí que la formación es la respuesta, pero la formación más un periodo de apoyo y asesoramiento durante unos meses o más puede suponer una enorme diferencia en la capacidad de una organización para contar la historia de su trabajo de una manera que sea competitiva a la hora de solicitar financiación. De nuevo, lo hemos comprobado por nosotros mismos.

Para concluir, este artículo parte de la creencia en el valor y el impacto positivo de las iniciativas dirigidas por la comunidad en el desarrollo social. Aunque sus logros son inconmensurables, no cabe duda de que se puede hacer mucho más cuando las organizaciones son capaces de crecer y fortalecerse. Cómo desarrollar mejores estrategias para fortalecer las organizaciones comunitarias es un tema que merece mucha más atención.

Ingredientes clave para una investigación comunitaria eficaz

Ingredientes clave para una investigación comunitaria eficaz

Ingredientes clave para una investigación comunitaria eficaz

Steve Fisher

Recientemente hemos tenido una experiencia positiva al trabajar con dos grupos comunitarios para diseñar y realizar investigaciones sobre temas que consideran importantes. Ambos proyectos de investigación fueron gestionados por Ninti One y nosotros contribuimos al trabajo como su aliado. Salí de cada proyecto pensando que las razones por las que los proyectos salieron bien merecían ser reflexionadas y escritas, lo cual es el propósito de este artículo.

Por investigación basada en la comunidad, me refiero a cualquier proceso que trabaje con la población local para llevar a cabo la investigación. Hay ejemplos en las páginas de proyectos y publicaciones de este sitio web. En uno de los proyectos que inspiraron este artículo, el objetivo del grupo era conocer la opinión del resto de la comunidad sobre un programa de educación cultural que su organización había estado llevando a cabo y también una iniciativa para mejorar las oportunidades de empleo locales. La comunidad está situada en el Territorio del Norte. En un segundo proyecto, formamos a un grupo de jóvenes para que realizaran una investigación sobre las prioridades de la juventud en una ciudad de Australia Occidental. El objetivo era que, a través de la investigación, defendieran la necesidad de que el gobierno invirtiera en determinados servicios e instalaciones para satisfacer las necesidades de los jóvenes.

Para ambos proyectos, trabajamos a través de un proceso de investigación estándar que tenía los siguientes pasos:

  1. Objetivos – Definir el propósito de la investigación y lo que se pretende conseguir
  2. Diseño – Identificar la información que necesitamos recolectar, elegir el método de investigación (como encuestas o grupos focales) y definir la muestra (con quién y con cuántas personas hablaremos)
  3. Recolección de datos – Normalmente a través de pequeños equipos de investigación.
  4. Análisis de los datos – Determinar qué nos dice la información que hemos recolectado.
  5. Presentación – Preparar diagramas y gráficos que interpreten y presenten los resultados de la investigación.

En ambos casos, los resultados obtenidos y la reacción de las comunidades fueron muy positivos. Entonces, ¿cuáles fueron los ingredientes clave que condujeron a una investigación comunitaria eficaz en estos ejemplos? La siguiente ilustración es un resumen.

Voy a explicar estos cuatro puntos. Algunas personas pueden trabajar mejor como investigadores solitarios, pero la investigación basada en la comunidad realmente requiere un enfoque de equipo. Por lo general, hemos trabajado con un mínimo de seis personas locales y hasta con unas veinte. La gente se siente más segura cuando hace algo nuevo como parte de un equipo. Puede ser divertido, especialmente cuando la gente comparte su sentido del humor.

Al iniciar el trabajo, hemos notado que dejar hasta un día para sentarse con la gente en un lugar cómodo y hacer algunos preparativos funciona muy bien.  Puede ser útil mostrar algunas diapositivas, especialmente cuando se pueden compartir y explicar ejemplos de investigaciones de otras comunidades. Pero el papel de rotafolio, las pizarras o tableros, y los marcadores son igualmente importantes. Anotar los cinco pasos anteriores, explicar cómo funcionan y luego pedir a la gente sus sugerencias, es un proceso de preparación participativa que a menudo saca lo mejor del equipo, dado que conocen bien la comunidad. Por ejemplo, puede ser importante preguntar:

  • ¿Qué queremos conseguir exactamente con la investigación?
  • ¿Cómo podemos explicar en qué consiste la investigación a las personas que están dispuestas a participar?
  • ¿Con quién debemos hablar?
  • ¿Qué métodos debemos utilizar?
  • ¿Cuál es la mejor manera de formular las preguntas? ¿Qué palabras y frases le resultarán más fáciles de entender a la gente?
  • ¿Cómo debemos registrar las respuestas de la gente?

Puede parecer obvio incluir este punto, pero muchas personas de las comunidades son invitadas a reuniones cuyo propósito no les queda claro. Debemos asegurarnos de evitar este problema al planificar la investigación basada en la comunidad. De lo contrario, es comprensible que el nivel de energía e interés del equipo disminuya. Merece la pena escribir un propósito u objetivo claro en un papel para pegarlo en la pared y luego referirse a él con regularidad como aquello que todos acordaron frente a la pregunta del primer punto de este listado.

El último ingrediente clave de una investigación comunitaria eficaz son los métodos. Solemos utilizar y recomendar las encuestas como el método más manejable para la población local que se inicia en la investigación. Las encuestas pueden administrarse con bastante rapidez en un par de días, especialmente si hay pequeños equipos formados por dos o tres personas que se desplazan por la comunidad para hablar con la gente. Los resultados se acumulan con el tiempo y la gente puede empezar a analizar e interpretar los datos a medida que se recoge más información.

También son valiosos otros métodos, como las entrevistas semiestructuradas, los grupos focales y los estudios de caso. Estos métodos requieren más práctica y habilidades para su manejo, pero son importantes para un enfoque de métodos mixtos que reúna datos cualitativos y cuantitativos.

MÉTODOS VISUALES para el trabajo con grupos comunitarios

MÉTODOS VISUALES para el trabajo con grupos comunitarios

MÉTODOS VISUALES

para el trabajo con grupos comunitarios

 

Steve Fisher

Este artículo responde a las solicitudes que hemos recibido, pidiendo más información sobre métodos visuales que permiten conversaciones productivas con grupos comunitarios. Estas conversaciones pueden girar en torno a problemas que intentan abordar, la planificación de un proyecto, ‘ventilar’ opiniones sobre un tema en particular u otras situaciones en las que alguien está facilitando una sesión con un grupo de personas locales.

En lugar de proporcionar una descripción detallada de cada método, ofreceré una visión general y los principios clave que lo sustentan. Hay variaciones en cada uno de ellos y diferentes maneras en que pueden adaptarse para satisfacer situaciones particulares. No declaro que estos métodos hayan sido desarrollados por Community Works, aunque sin duda hemos creado herramientas visuales y adaptado los métodos existentes. Pero a menudo han surgido buenas ideas a partir de las discusiones y la planificación de talleres con nuestros clientes y organizaciones aliadas, adaptando así cada método a la situación específica. Especialmente, este es el caso de lo que ha sucedido durante varios años de trabajo con Ninti One. Algunos de los métodos descritos aquí también han sido inspirados por especialistas en un tema en particular. Por ejemplo, el defensor más conocido de los mapas mentales, es Tony Buzan.

Líneas de tiempo

Hemos escrito sobre el método del Río del Tiempo en un artículo separado sobre el trabajo con la comunidad Minyerri como parte de los Proyectos de Aprendizaje Empresarial (Enterprise Learning Projects). Este método involucra a un grupo de personas que dibujan los eventos clave relacionados con un proyecto o un lugar en un río representado por dos líneas paralelas y onduladas en hojas tamaño pliego. El río se convierte entonces en el flujo general de la historia del proyecto o lugar. Durante una evaluación para Amnistía Internacional, tuvimos una experiencia similar al invitar a activistas y personal de América Latina a dibujar su viaje a través del programa que estábamos evaluando. Algunos eligieron dibujar un camino, otros un río y otros presentaron un conjunto de eventos relacionados entre sí.

Otro ejemplo de una línea de tiempo proviene de un taller de capacitación que facilitamos para Proyectos de Aprendizaje Empresarial en el que participaron pequeñas empresas aborígenes. Una de las partes más valiosas fue cuando dibujamos y discutimos un calendario visual para la creación de una nueva empresa, desde sentarse bajo un árbol para discutir la idea hasta abrir las puertas de un local de café o una tienda de ropa usada, por ejemplo.

Cualquiera que sea el método de línea de tiempo que se utilice, el valor radica en que un grupo de personas discutan lo que ha sucedido a lo largo del tiempo a medida que lo dibujan conjuntamente y luego, con la ayuda de un facilitador, den sentido general a la historia y aprendan de ella.

Mapas de Actores Clave

Este método está bien establecido en la práctica del desarrollo. Es fácilmente adaptable a diferentes situaciones. La idea básica es dibujar formas que representen a individuos, grupos u organizaciones que tienen relaciones entre sí o con otra organización (como la suya). Las líneas y flechas que las conectan, los colores utilizados para dibujarlas, la distancia entre cada una, el tamaño de cada forma y su posición dentro del esquema en su conjunto pueden utilizarse para denotar aspectos del paisaje actual de los grupos de interés. Por ejemplo, un departamento gubernamental puede estar representado por una forma o figura grande, mientras que los grupos de mujeres de las comunidades vecinas pueden ser representados como formas pequeñas con vínculos estrechos y fuertes entre sí, si eso representa la realidad.

Hemos utilizado este método muchas veces. Ninti One propuso una versión sofisticada que se muestra en la foto de abajo y que agrupa a los proveedores de servicios en una comunidad de acuerdo con el sector en el que trabajan (como los servicios de salud o servicios para jóvenes). Los grupos en este taller luego movieron las figuras que representan a las partes interesadas individuales para mostrar cómo planeaban manejar las relaciones para el beneficio futuro del programa.

Una vez más, el valor del método está en la conversación que sigue. Si la gente tiene un punto de vista diferente sobre cómo se deben dibujar las partes de un mapa de partes interesadas, entonces todos podemos aprender de esas diferencias y por qué han ocurrido. Por ejemplo, un departamento gubernamental puede comunicarse de manera muy diferente con el director general de una organización que con los trabajadores de base comunitaria.

Mapas Mentales

Hemos utilizado mapas mentales para fomentar y registrar discusiones sobre temas específicos con grupos de tamaños muy variados, desde tres a ochenta personas. Funcionan bien cuando el propósito es fomentar el debate sobre un solo tema, como las actitudes de la comunidad sobre la seguridad vial o la calidad de la vivienda. En estas situaciones, el tema se escribe en medio de una hoja de papel grande y el facilitador invita a que el grupo haga comentarios al respecto. Todo lo que se habla se registra en el mapa y esto anima a los asistentes a participar activamente en la conversación, ya que pueden ver cómo se escuchan sus ideas.

Este tipo de mapeo visual es especialmente valioso para el trabajo en grupos pequeños en talleres de capacitación, por ejemplo, o con juntas o comités. En los grupos focales, dibujar la conversación en un tablero ayuda a las personas que pueden ser reticentes a hablar con personas que tal vez no conozcan. Enfrentarse a la pizarra para hacer el ejercicio, en lugar de enfrentarse unos a otros en una mesa redonda, puede ser más fácil para todos al principio, dependiendo también de la cultura local. Puede convertirse en un proceso animado a medida que el grupo ayuda al facilitador a dibujar la conversación y luego a desarrollar y conectar las ramas del mapa a medida que se desarrolla.

Mosaicos

Usando el principio de que todos estos métodos son simplemente maneras de tener una conversación productiva que ayuda a una comunidad a analizar, planificar o entender mejor un tema, los mosaicos funcionan bien porque todos pueden involucrarse fácilmente. El mejor ejemplo reciente fue el modelo de gobernanza en el que trabajamos con los participantes en el reciente Seminario de Intercambio de Conocimientos para el programa Comunidades más Fuertes para los Niños. A medida que la gente sugería componentes o principios o buena gobernanza, construimos un mosaico en el piso que luego fue presentado a los participantes en un informe visual producido posteriormente. 

Los métodos de mosaicos, baldosas/azulejos o rompecabezas también son muy flexibles, ya que las piezas se pueden mover y las palabras escritas en cada pieza se pueden cambiar a medida que se desarrolla la conversación y surgen nuevas ideas.

Árboles

Dado que la mayor parte del trabajo de desarrollo consiste en cultivar algo (capacidad, conocimiento, productos, confianza, etc.), un árbol es un método visual muy eficaz. Hemos encontrado que funcionan bien como una manera de que un grupo se vuelva activo al principio de una reunión, cuando todos podemos estar un poco tímidos y aprensivos. Si hay mucha gente en la sala y es probable que otros lleguen tarde, dibujar una forma de árbol en la pared y pedirle a la gente que pegue notas en las ramas que representan logros o resultados de un programa es una manera positiva de romper el hielo. Las personas que llegan después de que la sesión ha comenzado pueden fácilmente recoger lo que está sucediendo y unirse a ella.

Es importante tener claro el propósito. Por ejemplo, pedir a las personas que escriban los resultados del proyecto que se han logrado hasta el momento, como hojas que se peguen en el árbol, es un buen ejercicio basado en las fortalezas. Para ser más analíticos, las hojas caídas podrían representar ideas insatisfechas y las flores o frutos podrían ser habilidades, relaciones o beneficios inesperados que se han logrado. Un riego puede ser el trabajo continuo requerido para hacer que el árbol, y por lo tanto el proyecto, se desarrolle y crezca. Se puede hacer mucho con el uso de un simple dibujo o representación de un árbol, siempre y cuando se dedique tiempo a leer y compartir adecuadamente las contribuciones que cada uno de los miembros del grupo ha hecho y a reflexionar sobre lo que significan para nuestra comprensión o para el proyecto en su conjunto.

Todos los métodos anteriores requieren una o más personas para facilitarlos. El papel del facilitador es presentar el ejercicio, explicar el propósito, animar y apoyar a las personas para que se involucren, abordar cualquier problema o duda que surja a lo largo del camino y luego señalar las ideas clave.

Usar métodos visuales sin facilitar el proceso adecuadamente es arriesgado. Si los participantes pierden la confianza en el proceso, entonces puede ser muy difícil mantener su compromiso de mantener más conversaciones y lograr el propósito para el cual las personas se han reunido. El facilitador ayuda al grupo a sacar el máximo provecho de los métodos al animarlo a aprender de la información producida por cada método visual.

Para qué un Centro de Arte Comunitario

Para qué un Centro de Arte Comunitario

Recientemente hemos estado trabajando con la comunidad de Minyerri como parte de un proyecto manejado por Proyectos de Aprendizaje Empresarial (Enterprise Learning Projects, ELP), mediante la organización La Familia Smith (The Smith Family). El trabajo hace parte del programa ‘Comunidades para niños’ financiado por el Gobierno Australiano.

En Agosto visité la comunidad, periodo durante el cual el Centro de Artes estaba siendo revitalizado y relanzado, por lo que fue un momento emocionante ya que el edificio estaba siendo arreglado y mejorado. Las mujeres y niños crearon un lindo letrero en el Centro (Ver foto).

Durante este momento, las actividades del centro también estaban siendo planeadas, razón por la cual yo estaba allá. Mi trabajo era ayudar a las personas que manejan el Centro de Artes y ELP a definir una manera para planear y medir los resultados del trabajo que estarían haciendo en el Centro en un futuro. A esto lo llamamos un marco de Monitoreo y Evaluación- el cual puede ser un nombre sobre-dimensionado para una tabla con tres columnas que sigue la siguiente lógica:

La discusión sobre este marco con las mujeres del Centro de Artes llevó a una pregunta importante: ¿Para qué sirve el Centro de Arte Comunitario de Minyerri? Hay muchas respuestas para esta pregunta. A medida que hablamos sobre esto, la conversación permitió identificar una serie de resultados que definen lo que están tratando de lograr. Estos resultados incluyen compartir conocimientos entre las generaciones mayores y las más jóvenes de la comunidad, desarrollo de nuevas capacidades, fomento de auto estima para niños y jóvenes y fortalecimiento de las conexiones que tienen con su historia y su cultura.

Aún es muy pronto, pero el Centro de Artes se está convirtiendo en un lugar en donde suceden muchas actividades. El dibujo y la pintura son parte del plan, especialmente como actividades que los niños pueden hacer después del colegio. Por ejemplo, una mujer está hacienda cojines. Minyerri también es cuna del Té de Gulbarn (Gulbarn Tea) y por consiguiente la recolecta y empaque de té también se da en este lugar. Más información sobre Gulbarn se puede encontrar en este enlace: https://gulbarn.com.au.

El primero de Octubre fue el día de la apertura oficial. Los niños formaron su propia organización de eventos y catering (como proveedores de comida), haciendo el material promocional y distribución alrededor de Minyerri. Prepararon wraps (rollitos) y maíz pira y vendieron comida y arte a la comunidad. Esto encajó como uno de los resultados esperados dentro del marco: ‘La comunidad, especialmente los padres, podrán conocer las cosas buenas que los niños pueden hacer en el Centro de Artes y que los ayudarán a crecer bien’.

Estaré visitando Minyerri nuevamente en Febrero, esta vez para ayudar a definir formas de recolectar información sobre los resultados obtenidos. No hay duda que revisaremos el marco a la luz de la experiencia que ha tenido hasta el momento el Centro de Artes. Espero con ilusión el momento de estar allá otra vez con la gente de Minyerri y el equipo de ELP.

Qué es un programa efectivo

Qué es un programa efectivo

Nuestra alianza con Ninti One

Nuestra alianza con Ninti One (www.nintione.com.au) nunca se queda corta en cuanto a trabajos complejos y retadores. Discusiones recientes han estado centradas en el diseño y planeación de programas. Algunos de los temas centrales para nuestro periodo actual de trabajo han sido los marcos para medición de impacto, entrenamiento en temas de gobernanza y cómo lograr un modelo efectivo para apoyar el lanzamiento de programas a lo largo de un área geográfica expandida en Australia remota.

Ha sido interesante reflexionar sobre qué hace que un programa sea efectivo. Basándonos en otros programas manejados por Ninti One y Community Works, hay seis ingredientes que se vienen a la cabeza:

  1. Relaciones productivas, especialmente por medio de invertir en procesos para generar confianza y buenas relaciones o ‘rapport’ con organizaciones comunitarias.
  2. Un modelo de programa que todos entiendan, queriendo decir que las prioridades, formas de trabajar, roles y responsabilidades encajan en una forma que puede no ser perfecta pero que funciona.
  3. Una estrategia que navega las complejidades que existen alrededor de la política, la práctica, las expectativas locales y las necesidades para lograr resultados esperados de una forma que sea costo-efectiva.
  4. Comunicación clara con los actores clave, refiriéndose a aquellas personas que tengan algún interés o que sean afectados por el programa de alguna forma. Esto implica asegurarse que las personas y organizaciones se mantengan informadas, sean consultadas y participen de una manera que sea apropiada para el programa.
  5. Un entendimiento compartido sobre qué es el éxito o cómo debería verse, lo cual es crítico en situaciones en las que haya muchos problemas y en las que los participantes del programa constantemente sientan que no están logrando lo que quieren.
  6. Liderazgo, especialmente en aquellos casos en que las decisiones deban ser hechas con claridad y confianza.

Sí, puede ser cierto que el manejo financiero, rendición de cuentas y otros factores no estén incluidos aquí, pero mi enfoque acá es el aspecto humano de los programas, el cual ha sido central a los programas y proyectos que tengan un foco social.

El trabajo continúa y esperamos seguir contribuyendo a los esfuerzos decididos de Ninti One y otras personas y organizaciones en Australia remota hacia lograr desarrollo social y económico a largo plazo.

Ninti One’s Aboriginal Community Researcher network plays a central role in its programs